#1 MOHAMMAD AL MURCI, CEO DE SHUQAIQ 3 COMPANY FOR WATER – S3CW

Shuqaiq 3: superando el reto

La planta desaladora Shuqaiq 3, situada en la provincia de Jizan, al suroeste de Arabia Saudí, se convertirá en una de las mayores plantas de desalación por ósmosis inversa (OI) del mundo, una vez finalizada en el cuarto trimestre de 2021. El proyecto, desarrollado bajo un esquema de una asociación público-privada con Saudi Water Partnership Company (SWPC), se enmarca en el programa de privatización Visión 2030.  Contribuye a mejorar la calidad de los servicios prestados a las ciudades saudíes, a garantizar la sostenibilidad medioambiental, a promover la contribución del sector privado a la economía local y a atraer la inversión extranjera directa al país.

Adjudicada al consorcio formado por Almar Water Solutions (a través de Abdul Latif Jameel Enterprises), Acciona, Marubeni Corporation y Rawafid Alhadarah Holding Co, y con una inversión 600 millones de dólares, la planta de Shuqaiq 3 producirá 450.000 metros cúbicos diarios de agua, lo que garantizará el suministro de agua potable a más de 1,8 millones de ciudadanos, al tiempo que contribuirá al desarrollo económico de la región de Jazan.

Reconocida en todo el sector del agua como una de las plantas más complejas e innovadoras de su categoría, en septiembre de 2019 fue galardonada con el premio “Utilities Project of the Year en los premios Middle East Energy Awards 2019, celebrados en Dubái (EAU), consolidando así su posición como uno de los proyectos más emblemáticos de la región.

Mohammed Al Murci, CEO de Shuqaiq 3 Company for Water – S3CW, la SVP creada para gestionar el desarrollo del proyecto, comenta los progresos realizados hasta la fecha y expone algunos de los retos que se han superado con éxito.

P. ¿Cómo avanza el proyecto hasta la fecha?

El avance del proyecto está siendo muy positivo, a pesar de la difícil situación mundial.

La construcción se ha completado en un 80%.  Hemos confirmado retrasos de 22 días, pero confío en que podamos recuperarlos en las próximas semanas y cumplir la fecha de entrega prevista, ya que la mayor parte de la obra civil y de los trabajos mecánicos están terminados.  Además, se ha iniciado la puesta en marcha en seco y en breve comenzará la puesta en marcha en húmedo, y también hemos empezado a movilizar al equipo de operaciones y mantenimiento.

Hemos tenido que gestionar muchas interconexiones, debido a nuestra ubicación. Existen otras dos plantas de agua a ambos lados de la nuestra: Shuqaiq 1 y Shuqaiq 2.

Estamos en la costa de Al Shuqaiq, por lo que trabajamos con el regulador medioambiental GAMEP, también con la guardia costera, la seguridad industrial, la municipalidad y otros organismos.  Tenemos que gestionar muchas relaciones, pero hasta ahora todo ha ido bien.

P. ¿Por qué la ubicación de Shuqaiq es tan buena para las plantas desaladoras?

Depósitos de presión de ósmosis inversa de Shuqaiq 3 IWP.

Al Shuqaiq es un lugar estratégico porque está entre las provincias de Jizan y Asir, y ambas, además de Najran, se consideran la principal región del sur de Arabia Saudí.  Tiene buen acceso al mar, por supuesto, y a Abha, que es la capital de la provincia de Asir.

P. Existen plantas de agua al norte y al sur de la instalación. ¿Supone esto una ventaja o un obstáculo?

Esto tiene ventajas y desventajas.  La ventaja es la gran experiencia en este ámbito.  Se conoce la situación del agua, las condiciones meteorológicas, el proceso de tratamiento, y podemos aprender de esa experiencia.  También es útil el hecho de que ya existe mano de obra capacitada y experimentada en la localidad, a la que podemos recurrir.  En cuanto a los contras, como las instalaciones están una al lado de la otra, debemos tener mucho cuidado con cada movimiento que hacemos para no afectar involuntariamente a las otras plantas de alguna manera.

P. ¿A cuántas personas dará empleo Shuqaiq 3?

Hay dos empresas: la de gestión del proyecto y la de operaciones y mantenimiento.  Juntas emplearán entre 70 y 75 personas.  Nuestra idea es comenzar las operaciones con un 70% – 80% de mano de obra local.

P. ¿Cuáles han sido los mayores retos para que el proyecto siga su curso?

Habría sido un reto construir este proyecto en cualquier momento, dada su ubicación relativamente apartada y la situación relativa de la zona, pero con la pandemia del coronavirus, los retos se multiplicaron.  Las restricciones de viaje tuvieron un enorme impacto en la logística.  Los contratistas no podían conseguir los materiales, ni traer a algunos profesionales que se requerían en el momento.  Había restricciones en general para trabajar, siendo en muchas ocasiones muy difícil.  Pero nuestro esfuerzo y perseverancia hicieron que lo consiguiéramos. Hace poco pusimos en marcha la subestación, así que ahora estamos conectados a la red – nuestro enchufe está en la toma – lo que fue un motivo de celebración.

P. La seguridad es vital en un proyecto como éste. ¿Se han alcanzado los objetivos de seguridad que se pretendían?

Estoy muy contento de confirmar que hemos conseguido más de 8 millones de horas en la obra sin ningún accidente ni pérdida.

Para mí, personalmente, la seguridad es una prioridad.  Es algo en lo que estamos de acuerdo todos los que participamos en este proyecto: La seguridad es siempre lo primero.  Ni el negocio, ni el calendario, ni los beneficios: la seguridad.  Nos hemos esforzado mucho desde el principio para integrarla en todos los aspectos de nuestra cultura.

En el momento álgido, teníamos unos 2.700 trabajadores en la obra, entre 40 y 50 grúas, cientos de metros de andamios, decenas de vehículos y 15 ó 16 contratistas y subcontratistas de muchas lugares y culturas diferentes.  Había muchas posibilidades de que se produjeran accidentes, pero gracias a la vigilancia y al duro trabajo de todos los implicados, especialmente del contratista EPC, no hemos tenido ningún incidente importante hasta la fecha.  Y que siga siendo así.

P. ¿Cuál es la fecha prevista para el lanzamiento del proyecto? ¿Cree que se cumplirá?

Mi objetivo inmediato es alcanzar la fecha de finalización mecánica.  Después de eso, el plazo más importante es la fecha de operación comercial, el 28 de octubre de 2021.  Estoy seguro de que lo lograremos.

P. Cuando echa la vista atrás, ¿cuáles son sus puntos más destacables del proyecto hasta la fecha?

Uno de los aspectos más exigentes -y, por tanto, satisfactorios- para mí personalmente fue gestionar las expectativas de nuestro cliente y ganarme su confianza. También, gestionar las expectativas y prioridades de los diferentes accionistas.  En mi consejo hay accionistas de Arabia Saudí, España, Japón… todos tienen idiomas, contextos culturales y formas de trabajar diferentes.  Todos estos accionistas se enfrentan a las exigencias de sus propias partes interesadas.  Mi prioridad era asegurarme de que, a pesar de estas diferencias, todos nos mantuviéramos centrados en nuestro objetivo común: completar el proyecto a tiempo, dentro del presupuesto y con la calidad deseada.  Y ahora que el final está a la vista, estoy encantado de que lo consigamos.

Otro aspecto que destacar es la fructífera relación que hemos establecido con el contratista EPC.  El contratista del EPC también forma parte del consejo de administración, además de ser responsable de la construcción.  Esto puede llegar a ser un conflicto difícil de manejar.  Por un lado, son socios en el Consejo de Administración y están al tanto de toda la información relacionada con el proyecto; por otro, son contratistas a los que tengo que dirigir para realizar el proyecto.  Mantener ese equilibrio fue un reto en algunas ocasiones, pero, de nuevo, estoy muy orgulloso de que, como equipo, hayamos sido capaces de conseguirlo.