La EDAR de Muharraq, una instalación única en Bahréin
La estación depuradora de aguas residuales de Muharraq comenzó a funcionar en 2014 y actualmente opera a su capacidad máxima de diseño, que es 100.000 m3/día. Almar Water Solutions ha aportado al proyecto, y a la región, su capacidad para desarrollar la futura ampliación de Muharraq -la planta tiene un plan de expansión de 60.000 m3/día adicionales- o cualquier otro proyecto hídrico bajo esquemas PPP.
Según un estudio del World Resources Institute, el Reino de Bahréin ocupa el puesto doceavo de los 17 países con mayor estrés hídrico del mundo, donde Qatar encabeza el ránking. Los efectos del cambio climático agravarán una situación ya insostenible, en la que la subida del nivel del mar, la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas serán las principales amenazas. Las aguas subterráneas del reino se encuentran en una situación delicada debido a estas amenazas, aunque cabe destacar que, a partir de agosto de 2016, las aguas subterráneas dejaron de extraerse y se guardaron como reserva estratégica para uso exclusivo en crisis y catástrofes.
El Electricity & Water Conservation Directorate se creó en 1999 para garantizar la sostenibilidad de los recursos primarios mediante la conservación de la energía y el agua.
Además, el programa de modernización de Bahréin, respaldado por nuevos proyectos de infraestructuras y el desarrollo de grandes zonas industriales, pretende reequilibrar la economía, orientándola hacia el turismo, eventos, el comercio minorista, el sector inmobiliario, las finanzas, las infraestructuras y los servicios relacionados con el petróleo y el gas.
La construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales de Muharraq
Muharraq es una planta de aguas residuales de última generación de 100.000 metro cúbicos diarios de capacidad, que cuenta con un sistema de canalización de aguas residuales en la cuenca de Muharraq, en el Reino de Bahréin. El sistema de canalización incluye el primer colector principal profundo por gravedad de 16,5 km en la región del Golfo y una red de recolección de aguas residuales.
La concesión fue firmada en 2011 por el Ministerio de Obras Públicas bajo un esquema de concesión BOO y BOOT a 29 años (hasta el 2 de abril de 2040) incluyendo el diseño y la construcción, la financiación, la operacón y el mantenimiento, y la transferencia del activo. La explotación de la instalación comenzó en 2014, y Almar Water Solutions adquirió el 35% de este proyecto en 2019.
Durante la fase de diseño, todos los equipos colaboraron estrechamente con contratista EPC para revisar el diseño desde la perspectiva de las operaciones y así garantizar la optimización del ciclo de vida de la planta y que los costes se mantuvieran al mínimo durante todo el periodo de concesión.
Antes de Muharraq, en el Reino de Bahréin sólo existía la planta de aguas residuales de Tubli, en la isla principal donde se encuentra la capital, Manama. Sin embargo, debido al crecimiento demográfico y urbano, se decidió que la isla de Muharraq tuviera su propia planta de aguas residuales.
Cuando la planta comenzó su operación en 2014, recibía unos 72.000 metros cúbicos de agua diarios para su tratamiento. Sin embargo, tras el desarrollo urbanístico de 2018-2019 y la ampliación del aeropuerto, la planta comenzó a funcionar a su capacidad máxima de diseño de 100.000 m3/día.
Una instalación única en Bahrein
La planta de aguas residuales de Muharraq es única en la región por su capacidad de saneamiento, tratamiento y reutilización de agua para riego, fines industriales y limpieza urbana. Otra posible aplicación futura de la planta es la recarga de acuíferos para ampliar los recursos hídricos naturales del país. Esta aplicación está en estudio, pero garantizaría un aumento de las reservas de agua dulce.
Este proyecto también es único porque Muharraq es la única depuradora del Reino desarrollada en régimen de asociación público-privado (PPP). Ahora está gestionada por dos empresas internacionales de gran prestigio en el sector del agua: Samsung Engineering Company Limited y Almar Water Solutions.
La contribución de Almar Water Solutions al proyecto
La planta de tratamiento de aguas residuales de Muharraq tiene un plan de ampliación de 60.000 m3/día adicionales. La ubicación de la planta ya ofrece espacio suficiente para realizar esta ampliación fácilmente sin inversiones o modificaciones significativas.
Almar Water Solutions es una empresa internacional especialista en el desarrollo de contratos de financiación de proyectos y promotor de infraestructuras sostenibles con presencia en los cinco continentes. La compañía ha aportado al proyecto, y a la región, la capacidad para desarrollar la futura ampliación de Muharraq o cualquier otro proyecto hídrico bajo esquemas de PPP.
Personal altamente cualificado y tecnología para obtener agua ultra limpia
La instalación emplea a unas 70 personas, entre la SPV y el equipo de operación y mantenimiento. El proyecto cuenta con personal altamente cualificado y un laboratorio certificado para estudios de calidad del agua.
Todas las aguas residuales de la isla de Muharraq fluyen a la planta de aguas residuales, que tiene una capacidad de tratamiento de 100.000 m3/día. Una cuenca de alcantarillado separada da servicio a los aproximadamente 260.000 habitantes de Muharraq, donde su captación es predominantemente doméstica, pero también abastece a varios hospitales y al Aeropuerto Internacional de Bahréin.
El proceso convencional de tratamiento de aguas residuales consta de tres etapas, con una fase independiente de tratamiento de lodos. Los lodos residuales se incineran en la planta de incineración de lodos. El flujo de tratamiento de aguas residuales consta de un tratamiento preliminar de filtrado y desarenado, un tratamiento biológico secundario y un tratamiento terciario de eliminación de sólidos y desinfección.
El tratamiento primario incluye el filtrado grueso, el filtrado fino y la desarenación mediante canales aireados. A continuación, el tratamiento secundario incluye el limado, la reacción, la decantación, la decantación en vacío y el tratamiento de fangos. Por último, en el tratamiento terciario se encuentran los filtros de disco y la desinfección ultravioleta para alterar el ADN, con lo que las bacterias se vuelven inviables. Tras estas fases, Muharraq obtiene agua ultra limpia para su vertido al mar en perfectas condiciones, incinerando los fangos secos residuales, y parte del agua se reutiliza para distintos fines.
La planta utiliza un tratamiento terciario para reciclar parte del agua usada tratada y convertirla en agua regenerada limpia de alta calidad. Una vez tratada para conseguir agua limpia de calidad, el agua resultante se canaliza para su uso en nuevos desarrollos urbanísticos, riego e industria.
Comprometidos con la protección del medio ambiente
La planta está situada junto a la autopista Prince Khalifah Bin Salman, en una isla recientemente regenerada y alejada de las zonas de población. La depuradora de aguas residuales de Muharraq contribuye al medio ambiente tratando y limpiando las aguas residuales de toda la ciudad. La planta elimina toda la contaminación, dando como resultado un agua limpia que puede devolverse al medio ambiente o reutilizarse.
La contribución significativa de este proyecto en términos de impacto ambiental es la incineración de lodos, que es un problema para la península de Muharraq. Este proceso reduce 3,5 veces el volumen de residuos, evitando el problema del almacenamiento en vertederos, mucho más contaminante.
El efluente de la depuradora cumple las normas medioambientales internacionales y se ha diseñado para ser reutilizado, por ejemplo, para el riego, lo que reduce la presión sobre los recursos hídricos naturales.
Durante la etapa de construcción, se nombró a un responsable de enlace con la comunidad para que se ocupara de los intereses y preocupaciones de la misma. También se designó a un consultor medioambiental independiente para que visitara y supervisara periódicamente las obras y el emplazamiento operativo, a fin de garantizar la aplicación y el mantenimiento de las medidas de mitigación medioambiental. Además, te tomaron las siguientes medidas medioambientales:
• Calidad del aire: las emisiones de los incineradores de lodos cumplen las normas europeas de buenas prácticas.
• Olores: la planta incorpora sistemas de vigilancia y control de olores.
• Calidad del agua: el efluente de las aguas residuales tratadas se diseñó para ser utilizado para el riego. El vertido cumple las normas medioambientales tanto contractuales como bahreiníes. Las alcantarillas están diseñadas para minimizar el impacto en las aguas subterráneas.
Valor añadido para la sociedad
Comprometida con la salud y el bienestar de los ciudadanos de Muharraq, y del resto del Reino de Bahrein, Muharraq implementa acciones y actividades que benefician a la población.
Por ejemplo, en 2022, Muharraq participó en un estudio sobre el SARS-CoV-2 con muestras de aguas residuales tomadas de la planta de tratamiento. El análisis de las aguas residuales permitió predecir o confirmar la circulación del SRAS-CoV-2 en una población específica.