Santiago Martinez Px

#4 Santiago Martínez, director de concesiones DE Almar Water SolutionS

Shuqaiq 3: invirtiendo en el futuro

La planta desaladora de Shuqaiq 3, situada en la provincia de Jizan, al suroeste de Arabia Saudí, se convertirá en una de las mayores plantas de desalación por ósmosis inversa (OI) del mundo, una vez finalizada en el cuarto trimestre de 2021. Adjudicada al consorcio formado por Almar Water Solutions (a través de Abdul Latif Jameel Enterprises), Acciona, Marubeni Corporation y Rawafid Alhadarah Holding Co, y con una inversión de 600 millones de dólares, la planta de Shuqaiq 3 producirá 450.000 metros cúbicos diarios de agua, lo que garantizará el suministro de agua potable a más de 1,8 millones de ciudadanos, al tiempo que contribuirá al desarrollo económico e industrial, tanto local como nacional.

Reconocida en todo el sector del agua como una de las plantas más complejas e innovadoras de su categoría, en septiembre de 2019 fue galardonada con el premio “Utilities Project of the Year en los premios Middle East Energy Awards 2019, celebrados en Dubái (EAU), consolidando así su posición como uno de los proyectos más emblemáticos de la región.

 En una nueva entrevista sobre este emblemático proyecto, hablamos con Santiago Martínez, director de concesiones de Almar Water Solutions y miembro del consejo de administración de la SPV que gestiona el proyecto, sobre por qué la inversión en estructuras hidráulicas es tan vital, y cómo encaja Shuqaiq 3 en este panorama.

P: ¿Cómo contribuirá Shuqaiq 3 al desarrollo económico de esta región de Arabia Saudí?

SM: La planta desaladora de agua de mar Shuqaiq 3 se está desarrollando para suministrar agua a las provincias de Jizan y Asir, en el suroeste de Arabia Saudí, que cuentan con una población de unos 4 millones de personas.  Estas regiones, muy cercanas a la frontera con Yemen, son extremadamente secas e históricamente han sufrido un déficit importante de recursos de agua dulce.

Tradicionalmente, el agua se suministraba a partir de recursos hídricos subterráneos y de plantas desaladoras térmicas. Sin embargo, la expansión económica de la zona, unida al aumento de la población, hace que la demanda de agua sea cada vez mayor.  Los recursos hídricos existentes no son ya suficientes para hacer frente a esta creciente demanda.

Shuqaiq 3 es la primera planta desaladora a gran escala que utiliza la tecnología de ósmosis inversa, junto con una alta eficiencia energética, de la región sur de Arabia Saudí.  El proyecto suministrará más de 150 gigalitros al año de agua potable para satisfacer la demanda doméstica e industrial de la región, preservando al mismo tiempo las reservas de agua subterránea para las generaciones futuras.

Santiago Martinez

Algunos de los enormes cartuchos de filtración de la planta Shuqaiq 3

P: ¿Qué ventajas aportará tanto a la población como al sector industrial?

SM: Shuqaiq 3 proporcionará a las ciudades e industrias de la región un aumento sustancial de la disponibilidad de fuentes de agua potable y una mejora de la calidad del agua.  La planta es increíblemente eficiente y podrá suministrar agua las 24 horas del día, a un precio muy competitivo.

El recurso hídrico adicional que proporciona facilitará un desarrollo adecuado de las ciudades y centros industriales locales, además de abastecer a los nuevos desarrollos agrícolas con tecnologías y sistemas de riego modernos.

P: ¿Cuál ha sio el papel de Abdul Latif Jameel Energy en este proyecto?

SM: Abdul Latif Jameel posee una participación significativa en la empresa del proyecto y ha codirigido el consorcio a través del equipo de Almar Water Solutions en la fase de desarrollo (licitación y cierre financiero).

Desde que comenzó la construcción en el segundo trimestre de 2019, el papel principal de Abdul Latif Jameel Energy ha sido en relación con los asuntos técnicos (ingeniería, gestión del proyecto y supervisión del contratista EPC), así como ayudar a dirigir la empresa del proyecto en términos de gestión y gobernanza adecuadas.

P: A pesar de las dificultades de la crisis de COVID-19, Shuqaiq 3 sigue cumpliendo el calendario previsto.  ¿Cómo lo han conseguido?

SM: El progreso del proyecto supera el 90% y estamos trabajando a toda velocidad para alcanzar la fecha de puesta en marcha operativa prevista para finales de octubre de 2021.

La pandemia de COVID-19 supuso sin duda un reto adicional en cuanto a la gestión del proyecto.  Hemos tenido que aplicar las medidas de prevención necesarias (como el distanciamiento social, los toques de queda, las restricciones de viaje, etc.).  También hemos puesto en marcha planes de agilización en relación con el suministro de equipos, la logística y los subcontratistas, para lograr nuestra productividad objetivo y alcanzar los hitos clave.

La seguridad ha sido una prioridad en todo momento, y estamos encantados de haber logrado hasta ahora más de 8,3 millones de horas de trabajo en la planta desaladora y otros 1,3 millones en la subestación, ambos con cero accidentes con baja.  Estoy muy orgulloso de todos los esfuerzos realizados por nuestra empresa de proyectos, el contratista EPC y el cliente, para superar todas las dificultades que nos hemos encontrado por el camino.

Santiago Martinez

Operarios de Shuqaiq 3 supervisando el estado de las obras

P: ¿Cree que las infraestructuras son una inversión segura?

SM: La inversión en infraestructuras en general es un factor crucial para el crecimiento y el desarrollo socioeconómico de cualquier país.

Una buena red de infraestructuras (como carreteras, electricidad, agua, saneamiento, comunicaciones, etc.) no solo es esencial para la producción industrial o para suministrar servicios básicos a los ciudadanos, sino que también es un motor de desarrollo.  Contribuye a aumentar la productividad, reducir los costes, facilitar la acumulación de capital humano (permitiendo un mayor acceso a la educación, la sanidad o la vivienda, por ejemplo), ayudando a diversificar la estructura productiva y a crear empleo.

Por ello, muchas organizaciones internacionales y ONGs consideran que la mejora de las infraestructuras es vital para reducir la pobreza y aumentar el crecimiento.

P: ¿Y la inversión en infraestructuras hídricas?

SM: En lo que respecta a la inversión en infraestructuras hídricas en particular, el agua es un recurso natural vital; un recurso que no es tan abundante como la gente piensa, y que a diferencia de otros productos básicos, no tiene sustituto.

Santiago Martinez

Se calcula que el agua dulce disponible en la Tierra es solo el 0,7% de toda el agua del mundo.  Generalmente se encuentra en ríos, lagos y acuíferos, a menudo no es fácilmente accesible y, está cada vez más amenazada por el cambio climático y la contaminación.

Según la ONU, se calcula que en 2025 1.800 millones de personas vivirán en zonas con escasez de agua, y dos tercios de la población mundial vivirán en regiones con estrés hídrico.

Además, existe una falta generalizada de infraestructuras para cubrir las necesidades de agua de la población.  La ONU calcula que el 10% de la población mundial (unos 800 millones de personas) no tiene acceso al agua potable y un tercio (unos 2.500 millones) carece de acceso al saneamiento básico.

Santiago MartinezP: ¿Cuál es el papel del sector privado en el desarrollo de soluciones para hacer frente a estos retos?

SM: La situación actual de escasez de agua y saneamiento plantea un enorme reto económico y social: proporcionar un suministro seguro de agua para miles de millones de personas e innumerables empresas que dependen de ella cada día.

Conseguirlo requiere una enorme inversión a una escala, que los gobiernos y el sector público no pueden proporcionar por sí solos.

La financiación por parte del sector público ya está sometida a una importante presión financiera, situación que se ha agravado mucho con la pandemia de la COVID-19. Es muy probable que el sector privado tenga que desempeñar un papel más importante en la financiación de las inversiones en agua.

Por ello, las empresas privadas del sector del agua, como Almar Water Solutions, tienen un papel fundamental a la hora de invertir en infraestructuras hídricas para ayudar a afrontar estos retos.

P: ¿Hasta qué punto son seguras las inversiones en infraestructuras hídricas?

SM: El agua es un modelo de negocio atractivo.  Debido al crecimiento de la población mundial, la demanda de agua sigue aumentando, sin que le afecten las condiciones económicas, los acontecimientos políticos o las preferencias cambiantes de los consumidores.  El sector es visto por muchos como una oportunidad de inversión a largo plazo, que históricamente ha ofrecido rendimientos estables y consistentes y, que puede servir como alternativa a los bonos de bajo rendimiento y a los volátiles mercados de acciones.

En el caso de los contratos de financiación estructurada (PPP), como el Shuqaiq 3, con un contrato a largo plazo respaldado por el Gobierno, el activo se clasifica como un activo financiero.  Esto significa que el rendimiento es conocido y fijo durante toda la vida del contrato, desde el inicio de la construcción.

P: ¿Cuáles son las ventajas de invertir en proyectos de agua?

SM: La inversión en agua tiene el potencial de ofrecer un crecimiento sólido y constante a largo plazo, en una amplia gama de entornos económicos o de mercado.

Dada la magnitud del problema mundial del agua y el hecho de que las infraestructuras hídricas son extremadamente costosas y requieren mucho capital, no es de extrañar que el agua se considere cada vez más un producto básico que es potencialmente tan rentable como el petróleo, los metales o la agricultura, por ejemplo.

No es inconcebible imaginar una situación en la que el agua, como clase de activo, pueda llegar a convertirse en la clase de activo físico más importante basado en materias primas.  Los activos del agua ya se negocian en la bolsa estadounidense desde octubre de 2020.

En los próximos tres a cinco años, se espera que el sector privado represente el 30% de las inversiones en agua. Europa ya ha empezado a hacer la transición hacia el suministro privado.  La mayoría de los servicios de agua en el Reino Unido y Francia, por ejemplo, están a cargo de operadores privados.  Es probable que esta tendencia continúe a nivel mundial, lo que tendrá importantes repercusiones en el panorama de las inversiones.